¡Lo mandaron al sofá! Esposa de Rigo le hizo escena de celos por la telenovela; hay video

La telenovela de Rigoberto Urán continúa seduciendo a la teleaudiencia con su historia de valentía, persistencia y disciplina. Sus inicios en Urrao, su historia de amor con una joven de su pueblo y hasta la tragedia familiar que tuvo que sobrellevar cuando apenas era un adolescente son algunas de las situaciones que han enmarcado el hilo de la producción.

Y es que para nadie es un secreto que, si existe un amor más grande que el de Rigo por su bicicleta, es el que siente por su esposa e hijos. Michelle Durango es la mujer urraeña que ha acompañado al pedalista antioqueño desde los inicios de su carrera y con quien posee un sólido hogar y una próspera sociedad en los negocios que administran conjuntamente.

Su historia comenzó en el año 2009 y hace un par de años tuvieron a su primera hija, llamada Carlota. Asimismo, Michelle lleva una relación muy cercana y cariñosa con Matías, el hijo mayor del ciclista que nació producto de una relación anterior a la de su actual esposa.

En la telenovela se ha mostrado al deportista antioqueño como un hombre muy extrovertido y con esa chispa que solo su personalidad puede transmitir. Tanto así que otras mujeres se sienten atraídas por el ‘Toro de Urrao’.

Adriana, personaje interpretado por Stephania Duque, es una bella mujer que llama la atención en el pueblo y hasta del propio Urán. El ciclista se deja seducir por los encantos de esta hermosa visitante y de inmediato provocó los celos de Michelle, tanto el personaje ficticio como el real.

Y es que, aunque parezca insólito, la propia Michelle Durango le reclamó a su esposo por la escena en la que se ven muy junticos los actores de la telenovela. Lo cual no dejó de ser curioso porque hasta lo mandaron a dormir al sofá.

“Que no le voy a dar más explicaciones Michelle, no más explicaciones”, dijo el ciclista, que encontró una rápida y contundente respuesta de su esposa. “Es que usted es muy casquillero, cómo va a estar echándole los perros a una y a la otra también. No, ningún hace 20 años. Vaya que lo piche un perro y duerme por allá lejos”, le reclamó Durango.