La canción, que llegó al corazón de la disputa entre ambos raperos, se ha convertido en un fenómeno cultural no solo por su música, sino por sus graves acusaciones, lo que la ha convertido en un tema candente en la industria.
La portada de la canción, que presenta una imagen satelital de la mansión de Drake, también incluyó 13 pines rojos, evocando los marcadores de aplicaciones que indican la ubicación de delincuentes sexuales. Sin embargo, no se ha encontrado evidencia que respalde estas afirmaciones.
A pesar de la polémica, Not Like Us se convirtió en un éxito rotundo. El tema no solo conquistó los Grammy, llevándose premios como Canción del Año, Mejor Interpretación de Rap y Mejor Video Musical, sino que también alcanzó el puesto número uno en ventas y Spotify. La crítica la aclamó, y muchos consideran que Kendrick Lamar ganó la batalla de la rivalidad, como señaló Joseph Patterson, editor de Complex: “Es innegable quién salió victorioso”.
Pero el drama no terminó ahí. Drake, lejos de quedarse en silencio, lanzó una respuesta musical, aunque esta pasó sin pena ni gloria en comparación con el impacto de Lamar. Además, el canadiense recurrió a los tribunales, demandando a Universal Music Group y Spotify, acusando a ambos de manipular las reproducciones de la canción utilizando bots, algo que fue tajantemente rechazado por las plataformas.
El 2025 también trajo una nueva demanda por parte de Drake, en la que acusó a Universal de anteponer la codicia sobre el bienestar de los artistas, tras una posible vinculación de la portada de Not Like Us con un tiroteo ocurrido en su mansión. Este capítulo legal se sumó a la serie de tensiones entre ambos raperos, quienes siguen siendo figuras clave en una de las rivalidades más comentadas del rap.
