Camila Cabello compone una 'canción de amor' a los inmigrantes

Con apenas seis años, la cantante Camila Cabello abandonó su Cuba natal junto a su madre para embarcarse en un largo viaje -vía México- hasta Miami, donde vivieron en casa de un amigo de la familia hasta que consiguieron alquilar una pequeña habitación en la que arrancó su propia versión del sueño americano.

Más de una década después, la intérprete ha cumplido con creces sus objetivos, convirtiéndose en una de las grandes estrellas de la industria musical por derecho tras tomar la sorprendente y arriesgada decisión de abandonar la banda Fifth Harmony, con la que había conocido el éxito tras salir del concurso 'The X Factor'.

Ahora la joven planea utilizar su nueva libertad artística para ayuda a erradicar la mala reputación que persigue a los inmigrantes en su país de adopción como mejor sabe: a través de la música.

"Actualmente estoy inmersa en el proceso de escribir acerca de nuestro viaje. Quiero componer una canción de amor a los inmigrantes. Esa palabra, inmigrantes, tiene una connotación muy negativa. Puedo imaginarme a todas esas niñas pequeñas que sueñan con venir aquí, a los Estados Unidos, pero que al mismo tiempo no se sienten bienvenidas. Y eso me inspira para esforzarme y poder transmitirles toda mi luz. Quiero representar todo eso que la gente se imagina cuando piensa en América: una persona que, sin importar cuál es su lengua materna o su religión, tiene la oportunidad de hacer sus sueños realidad si trabaja lo suficiente", revela la excomponente de Fifth Harmony en una entrevista concedida junto a su madre a la revista Glamour.

En la conversación, madre e hija recuerdan los obstáculos que tuvieron que superar para construir una vida mejor en Estados Unidos ellas dos solas, ya que el padre de Camila tardó casi dos años en reunirse con ellas.

"De pronto, había muchas cosas que eran muy diferentes. Me encontré en una nueva escuela con nuevos amigos, no hablaba el idioma y echaba de menos a mi padre. Tenía un pequeño calendario de Disney en el que iba tachando cada día hasta la fecha en la que se supone que iba a volver a verle. Cuando por fin llegó, un año y medio después, me sentí muy feliz", rememoró la joven intérprete.