Steve Martin se alegra de haber esperado hasta los 60 para ser padre

Cuando ya parecía que el actor Steve Martin había descartado completamente la paternidad de entre sus planes, su pareja y él dieron una sorpresa al anunciar hace cuatro años que estaban esperando el que sería el primer retoño para ambos, una niña cuyo nombre nunca ha llegado a hacerse público.

Este debut tardío como padre ha supuesto una de las mayores fuentes de satisfacciones en la vida del intérprete, especialmente al saber que tomó la decisión adecuada esperando hasta que encontrar a la mujer perfecta para él y a que su agenda profesional se vaciara notablemente para dar un paso tan importante.

"Si hubiera tenido un hijo antes, habría sido un padre desastroso porque toda mi atención habría estado puesta -erróneamente- en mi carrera", confiesa el intérprete cómico en el nuevo número de la revista AARP The Magazine.

A la hora de educar a su pequeña, la estrella de cine tiene muy claro que no quiere repetir los mismos errores que cometió con él su propio padre convirtiéndose en una figura distante y fría.

"Siempre estoy ahí para ella, estoy muy presente, y es maravilloso. Ella me aporta mucho más de lo que yo pueda llegar a darle", afirma.

Con su carrera cinematográfica relegada a un segundo plano, Steve se siente perfectamente feliz volcándose en cuerpo y alma en la familia que ha formado junto a su esposa Anne Stringfield (45). Ni siquiera la considerable diferencia de edad que le separa de su mujer o el hecho de que pudiera ser fácilmente el abuelo de su pequeña consiguen empañar esta alegría y vitalidad que caracteriza ahora su vida.