La pulsera Pavlok te ayuda a romper con los malos hábitos
La pulsera Pavlok promete erigirse como la solución ideal para aquellas personas más indisciplinadas, carentes de fuerza de voluntad o directamente perezosas y que necesitan un empujón adicional para poder cumplir satisfactoriamente con sus ambiciosos propósitos de año nuevo. Tanto es así, que con solo llevarla en la muñeca y sincronizarla con una de las muchas aplicaciones móviles que a ella se ven asociadas, el usuario lo tendrá algo más fácil (o eso aseguran sus creadores) a la hora de desprenderse para siempre de sus hábitos más nocivos.
"Pavlok es una especie de entrenador para la mejora de la conducta, ya que vibra a modo de recompensa cada vez que su dueño se comporta como debe y aplica breves descargas eléctricas para reprenderle cuando se salta las normas. Mucha gente podrá dejar de fumar, de morderse las uñas, de comer de forma compulsiva y de dormir más allá de los horarios establecidos gracias a la forma en que se conecta con numerosas aplicaciones. ¿Estás listo para cambiar de hábitos?".
Además de brindar a su dueño la posibilidad de reprimir sus impulsos más perjudiciales, el brazalete también le puede ser de gran ayuda a la hora de incorporar a su día a día otros hábitos muchos más saludables de los que presumir ante amigos y familiares: eso sí, siempre que los presente como fruto de su determinación y capacidad de sacrificio y no como respuesta al carácter implacable de este artilugio en lo que a impartir castigos se refiere.
"Con Pavlok también puedes crear buenos hábitos e incluso luchar contra aquellas acciones negativas que ni siquiera sabías que llevabas a cabo. Aunque mucha gente no sufra de tabaquismo o de otros problemas fácilmente visibles, es posible que también cometan de forma inconsciente numerosos errores que les impiden llevar una vida sana y feliz. Hay un sinfín de buenas prácticas que podrías desarrollar gracias a la ayuda de Pavlok".
Cierto es también que las aplicaciones móviles asociadas a Pavlok ofrecen a todo aquel que las instale un sistema de premios y reconocimientos para mantener intacta su motivación y evitar que sucumba a las comprensibles tentaciones que se derivan de su condición, ahorrándose de paso alguna que otra descarga eléctrica que podría prevenirse.










