Orlando Bloom medita para evitar los peligros de la fama
El actor atribuye a la filosofía budista y a la meditación el haber sabido conservar los pies sobre la tierra incluso en sus años de mayor popularidad
Tras protagonizar dos de las franquicias más exitosas del cine, 'El señor de los anillos' y 'Piratas del Caribe', el actor Orlando Bloom se puede considerar a sí mismo todo un experto en los peligros de conocer la popularidad a una edad demasiado temprana y casi sin previo aviso. En su caso, ha conseguido mantener el norte gracias a la práctica del budismo y la meditación.
"Yo medito a diario, me ayuda a establecer mis objetivos de cara a la jornada. También me ayudó a lidiar con mi súbito acenso a la fama, que es bastante parecido a encontrarse dentro de un coche en llamas. Ves las víctimas a tu alrededor constantemente; bien sea por los 15 minutos de fama o por haberse convertido en una sensación de YouTube, da lo mismo. No se dan cuenta de todo lo que implica. Lo que necesitas hacer es aprender a estar a la altura y salir de ese coche en llamas, con gracia e integridad".
Por esa misma razón, el intérprete se siente en gran parte aliviado ahora que ha entrado en la cuarentena y todas las frivolidades que gobiernan la industria en que trabaja han dejado de tener importancia para él.
"Hay cierta sabiduría que llega con la edad, cuando empiezas a encontrar la felicidad en los pequeños placeres. Yo tengo un niño, unas cuantas cicatrices, y un poco de vida a mis espaldas. Estoy paciente por descubrir cuál será el próximo capítulo".
Uno de los aspectos en que ha cambiado Orlando según ha ido cumpliendo años ha sido en su relación con las redes sociales, que en un principio evitaba para tratar de proteger su intimidad hasta que se dio cuenta de que le abrían todo un mundo de posibilidades.
"Me parece una manera maravillosa de conectar con los fans. Lo evité durante años, y no tengo Twitter, pero el año pasado también me registré en Facebook. Mi madre aún conserva un artículo que decía que su hijo había sido la persona más buscada en Google cuatro años seguidos, ¡y se referían a mí!".