Esto fue lo que hizo Irina Shayk para recuperar su cuerpo después de dar a luz
Apenas unas semanas después del nacimiento de su primera hija el pasado abril, Irina Shayk hacía un breve paréntesis en sus redes sociales (donde acostumbra a publicar casi en exclusiva imágenes de sus campañas publicitarias) para compartir una fotografía más personal que acompañaba del revelador título "situación actual" y en la que aparecía flotando en la piscina al tiempo que mostraba una espectacular figura .
De esa forma, la modelo rusa se convertía en la última estrella de las pasarelas en dejar al mundo boquiabierto con su recuperación en tiempo récord tras dar a luz. Ahora la novia de Bradley Cooper ha confesado qué método siguió para conseguirlo, uno que resulta ser de lo más sencillo y asequible al combinar algo de sentido común con cero privaciones y mucho ejercicio.
"Personalmente, no creo en las dietas. Mi postura es que, si te apetece comer una hamburguesa o una pizza o algo de jamón serrano, entonces deberías hacerlo"
Ha asegurado en declaraciones al portal 'Entertainment Tonight', esgrimiendo el mismo argumento que ya han utilizado antes muchas de sus compañeras de profesión para justificar su buen aspecto al poco de debutar en la maternidad.
"Ese es el secreto, disfrutar de la vida; y tratar de mantener un equilibrio entre lo que comes y cuánto entrenas siempre ayuda"
Desde el inicio de su relación sentimental, la modelo y el oscarizado actor se han negado rotundamente a compartir cualquier detalle de su vida privada, incluida la llegada al mundo de su primogénita, más allá de generalidades relacionadas por ejemplo con cómo consiguen encontrar tiempo en sus apretadas agendas para mantener viva la llama de la pasión.
"En ocasiones, una tarjeta o una breve nota pueden ser lo más romántico"
Ha explicado ella en la misma conversación, igual de escueta que siempre.
Siguiendo esa misma línea, Irina tampoco está dispuesta a comentar si ya tiene planes de boda con el padre de su pequeña. Lo máximo que accede a comentar es que, de animarse a pasar por el altar, el suyo sería un vestido de novia sin estridencias.
"Mi estilo es muy sencillo; para mí, menos siempre es más. Me gustan las mangas largas, que son el punto clásico, con un escote en la espalda, por ejemplo"
Ha apuntado en referencia a uno de los diseños que lució hace unos días en el desfile de la firma Pronovias en Barcelona.