¿Conoces el figging? La práctica sexual que reta los límites del placer
Con un trozo de jengibre y buena imaginación, los amantes de las sensaciones fuertes pueden retrasar o acelerar el orgasmo.
En sus orígenes, el figging, consistió en una táctica de dominación y de castigo durante la época del Imperio Romano. Sin embargo, hoy en día es una de las prácticas más buscadas por los amantes de las sensaciones fuertes o el BDSM. Consiste en introducir un pedazo de jengibre sin piel, previamente lavado, en el ano o la vagina, para experimentar una sensación de cosquilleo o ardor que aumenta la excitación.
Como una práctica sexual consensuada, el figging puede proporcionar una experiencia única para los sentidos al retrasar o acelerar el orgasmo. El jengibre es una raíz con importantes propiedades medicinales como mejorar la digestión, combatir el resfriado común y ayudar con las náuseas, pero también puede ser usado como un catalizador durante el sexo.
Te puede interesar: ¿Conoces alguno? Estos son los 5 juguetes sexuales más peculiares del mercado
¿Cómo se usa?
Al ser un objeto que se introducirá en el cuerpo, se debe tener especial cuidado con el lavado. Una vez la raíz ha sido desinfectada y pelada, se recomienda darle una forma estrecha en la base para facilitar el agarre y evitar que se pierda en la zona anal. En el caso de ser introducido en la vagina, no es necesario el uso de lubricante ya que puede causar un efecto sellador y evitar que la raíz libere su sustancia.
Sin embargo, al usarse en la zona anal es importante el uso de lubricante para disminuir el riesgo de sufrir heridas. Al igual debes tener presente el lavado de manos ya que por sus propiedades puede causar irritación en zonas sensibles como los ojos.
Para evitar la transmisión de enfermedades no se recomienda compartir la raíz con la pareja o compañeros sexuales. Debes comprobar no ser alérgico al jengibre, pues puede desencadenar una reacción que ponga en riesgo la salud.
Puede acelerar o retrasar el orgasmo
Al introducir el jengibre en la zona deseada, la sensación de ardor y calor aumentará de manera progresiva a medida que la raíz libere su jugo en 20 o 30 minutos. Hay quienes prefieren apretar las piernas o los esfínteres para aumentar la intensidad e inducir al orgasmo.
Mira también: Trapecio: una de las posiciones sexuales más placenteras para los hombres
Si bien no es una práctica considerada riesgosa, es necesario tener precauciones en la forma que se le dé a la raíz para no causar heridas con partes puntiagudas. Para identificar si es una práctica que te gustaría realizar, puedes probar frotando un pequeño trozo de la raíz en la zona de tu gusto y ver cómo te va. Pero puede tardar un poco en hacer efecto.