Karezza, la práctica sexual con la que vas a experimentar mucho placer
Si quieres experimentar otro tipo de placer en la sexualidad, aquí te tenemos una forma en la que puedes innovar.
La sexualidad puede ir más allá del climax y por eso aquí te contamos sobre el placer que se puede experimentar sin los orgasmos. Te contamos sobre el método Karezza, que además trae beneficios en la salud física, emocional y mental.
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¿Qué es el método karezza?
Este nombre viene de la palabra italiana carezza, que significa caricias y básicamente en esto se centra este método. Se trata de experimenta placer intentando vivir libremente en la sexualidad.
La primera vez que se adaptó este método fue por Alice Bunker Stockham, quien fue una de las primeras médicas en Estados Unidos. En su libro ‘Karezza, la ética del matrimonio’, se basó en que este se centra en el control del orgasmo masculino.
El método karezza se centra básicamente en las caricias y los tocamientos antes del acto sexual. Dentro de estos se pueden encontrar miradas, abrazos y el sexo oral.
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Lo que esto hace es que incrementa la confianza entre la pareja y puede llevar a más sensualidad y erotismo. Este tipo de tocamientos y juegos previos preparan al cuerpo para el momento del climax, si es que las dos personas quieren llegar a este.
Este método requiere de técnica erótica y también de estimulación sexual, por eso en necesario tiempo. No es algo que se puede hacer si la pareja cuenta con pocos minutos y se le debe dedicar atención.
Además, cuando se pone primero la sensualidad y las caricias se puede prolongar el placer, por lo que no será necesario llegar al climax.
¿Cómo se puede implementar el método karezza?
Es necesario que la pareja sepa que deben tener respeto y bastante comprensión para poder explorar las zonas erógenas. Las miradas son bastante importantes en esta técnica y también susurrase lo que deseen.
Normalmente, se omite la comunicación con este método para que los otros sentidos ganen intensidad. Las personas se deben dejar llevar por el placer que causan los besos y las caricias sin dejar pasar por alto ninguna parte del cuerpo.
A diferencia de los que muchas personas piensan, la calma y pasividad pueden llegar a incrementar totalmente los niveles de excitación.